El CEO de Silbon, Pablo López, afronta la futura reducción de jornada con la tranquilidad que ofrece tener una amplia gama de posibilidades para hacer frente a este requisito sin que se vea alterado el normal funcionamiento de la empresa. Una de las principales ventajas es que «en nuestras tiendas ya estamos por debajo de la jornada marcada por ley», añade López, por lo que la transición será «mucho más llevadera».
Otra solución, aunque no está entre las preferentes, consiste en ampliar los contratos parciales para suplir los huecos que quedarán con los recortes de horarios. «Pero es algo que tenemos que ver a fondo porque el personal con este tipo de contratos es el que desarrolla su trabajo en los momentos de mayor pico de demanda», señala el CEO de Silbon, por lo que esta medida supondría dejar sin posibilidad de refuerzo los días señalados de ventas.
Es por este motivo por lo que una de las opciones que se baraja desde la empresa cordobesa de moda masculina, con una alta implantación en el territorio nacional, es el de cierres parciales de tiendas. «Tenemos comercios en muchas capitales de ciudad que abren de manera ininterrumpida y, en algunos casos, se podría plantear su cierre al mediodía», concreta.