Cristina Kirchner ha sido una voz crítica respecto al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobado recientemente. Durante su intervención en el Congreso Educativo Nacional en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires, Kirchner expresó su preocupación por lo que considera un «cheque en blanco» otorgado al gobierno de Javier Milei para negociar un nuevo préstamo con el FMI.
La líder del Partido Justicialista (PJ) señaló que este acuerdo refleja una descomposición institucional que afecta a los tres poderes del Estado: Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Según Cristina Kirchner, el respaldo legislativo al Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que habilita el acuerdo con el FMI fue impulsado por legisladores, incluidos algunos peronistas, quienes, en su opinión, no actuaron en defensa de los intereses del pueblo.
En su discurso, Kirchner criticó duramente al presidente Milei, acusándolo de actuar en alineación con intereses extranjeros, como el gobierno de Estados Unidos, que recientemente le prohibió el ingreso al país debido a causas judiciales relacionadas con corrupción.
Además, cuestionó la metáfora utilizada por el vocero presidencial para describir el acuerdo con el FMI, calificándola de «horrible» y señalando que el país enfrenta una crisis económica agravada por despidos y aumentos de precios.
La expresidenta también lamentó la falta de unidad dentro del peronismo, afirmando que si los diputados peronistas de provincias como Catamarca, Misiones y Salta hubieran votado junto al resto del partido, este «cheque en blanco» no habría sido posible.
Para Kirchner, esta situación es un reflejo de la necesidad de reorganizar el peronismo y construir una nueva estatalidad que priorice los derechos y necesidades del pueblo. El acuerdo con el FMI, según Kirchner, carece de detalles sobre el monto del nuevo crédito y se produce en un contexto de reservas negativas en el Banco Central.
Crisis
Este escenario, combinado con la crisis económica y la falta de transparencia, genera incertidumbre sobre el futuro del país y la capacidad de cumplir con las condiciones impuestas por el FMI. En su intervención, Cristina Kirchner hizo un llamado a la reflexión y a la acción política, instando a los argentinos a organizarse y trabajar por un futuro más justo y equitativo.
Su crítica al acuerdo con el FMI y al gobierno de Milei no solo busca señalar los problemas actuales, sino también movilizar a la sociedad hacia un cambio estructural que permita superar las crisis económicas e institucionales.
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