La familia de Giovani Benavídez intenta salir del «infierno» después de que el bebé de tres meses estuviera al borde de la muerte en Córdoba, por el suministro de fentanilo contaminado, cuya investigación a nivel nacional tiene 74 fallecidos en el país.
El viernes pasado se dio a conocer que el juez federal de La Plata, Ernesto Kreplak, incorporó cuatro historias clínicas de pacientes atendidos con las partidas de HLB Pharma y Ramallo S.A. denunciadas de por ANMAT en la clínica Vélez Sarsfield y que dieron positivo a la bacteria Klebsiella.
Fentanilo contaminado en Córdoba: el caso de un bebé que sobrevivió
En este grupo hubo dos adultos, uno de ellos fallecido, y dos bebés, de quienes hasta el momento no había mayores detalles sobre su situación de salud.
«Giovanni estuvo semanas con la sedación con fentanilo contaminado, recién el 9 de mayo nos enteramos que tenía Klebsiella y los médicos no entendían la causa porque no había (esa bacteria) en el hospital», explicó el pare del bebé, Darío, frente al micrófono de Canal 10.
Ver: Fentanilo contaminado: detectan el primer caso de un fallecido en Córdoba
El joven dijo que su hijo nació el 26 de abril por cesárea y presentó un «quejido respiratorio» por lo cual se decide si traslado a la sala de neonatología. Los médicos que lo recibieron decidieron intubarlo y sedarlo para evitar que se quite el respirador.
Cuarenta y cuatro días después del nacimiento de Giovanni, llegó a la clínica de barrio Parque Vélez Sarsfield el alerta de ANMAT sobre los lotes de fentanilo contaminado. «Cuando lo cambiaron por morfina ya era tarde porque el bebé ya estaba muy contaminado», dijo su padre.
Después de dos descompensaciones que podrían haber terminado con su vida, el bebé de tres meses logró recuperarse y espera en los próximos días ser operado para colocarle un botón gástrico.
De acuerdo a la investigación que dirige Kreplak la clínica Vélez Sarsfield recibió 1700 ampollas contaminadas por lo cual no se descarta que haya más casos de los cuatro informados.