Si te gusta el pan suave, tierno y con ese brillo irresistible que ves en la foto, esta receta de pan de leche casero es para guardar y repetir. No requiere experiencia previa: solo un buen amasado y respetar los levados para lograr la textura de “nube” que lo hace tan popular.
Este clásico acompaña desayunos, meriendas y momentos familiares. Su sabor levemente dulce y su miga suave lo convierten en uno de los panes más versátiles de la cocina casera.
A continuación, la receta completa para que te quede perfecto.
Ingredientes básicos
Harina 000/0000: 500 g
Levadura seca: 8 g
Leche tibia: 250 ml
Azúcar: 80 g
Manteca blanda: 60 g
Huevo: 1
Sal: 1 cucharadita
Esencia de vainilla (opcional)
1 huevo extra para pintar
Cómo hacerlo paso a paso
1. Activar la levadura
Mezclá leche tibia, azúcar y levadura. Esperá 10 minutos hasta que espume.
2. Formar la masa
Uní harina, azúcar, sal, huevo y la mezcla de levadura. Integra todo con la leche.
3. Amasado con manteca
Sumá la manteca blanda y amasá 10 minutos hasta que esté lisa y elástica.
4. Primer levado
Dejá reposar 1 hora, tapado, hasta que duplique su tamaño.
5. Armado de los panes
Dividí la masa en 6 u 8 porciones, formá bollos o piezas alargadas y colocalas en un molde.
6. Segundo levado
Dejá crecer 30 a 40 minutos más.
7. Horneado
Pintá con huevo y llevá al horno a 180°C por 18–25 minutos, hasta que doren.
8. Enfriar y disfrutar
Retirá del molde y dejá enfriar. Quedan suaves, brillantes y con una miga increíble.
Tips para que salgan perfectos
Para mayor suavidad, reemplazá 50 ml de leche por crema.
Si los querés más brillantes, pincelalos con almíbar al salir del horno.
Congelan muy bien: recalentados vuelven a quedar esponjosos.
Variantes rápidas
Con chips de chocolate
Rellenos de dulce de leche o pastelera
Estilo salado con queso rallado
