Octavos de final
El Lobo ganó con gol de Benja Domínguez y, apenas terminado, se largó la hecatombe.
Terminó a las trompadas el partido que Gimnasia y Esgrima La Plata le ganó por 1 a 0 a Barracas Central por los octavos de final de la Copa Argentina en el estadio de Lanús. Apenas el árbitro Darío Herrera pitó el final, el defensor de Gimnasia Yonathan Cabral y el delantero uruguayo de Barracas Jhonatan Candia, que se habían pechado durante toda la tarde, se tomaron a golpes de puño al mismo tiempo que un colaborador de Gimnasia ingresó a la cancha para agredir al jugador de Barracas.
Las corridas, los manotazos y los puntapiés voladores se generalizaron y recién después de algunos minutos, la gresca generalizada pudo detenerse. Cabral y Candia y Gustavo Canto, suplente del equipo de La Plata, fueron expulsados aunque en el informe del árbitro podría incluir algunas expulsiones más.
El gol de Gimnasia lo marcó Benjamín Domínguez a los nueve minutos del segundo tiempo, después de un centro de David Zalazar desde la derecha que Rodrigo Castillo le bajo de cabeza. Fue el último que el delantero de 20 años señaló para el equipo platense ya que en los próximos días viajará a Italia para incorporarse al Bologna en una operación que le dejará cuatro millones de euros a la tesorería del Lobo.
Con este triunfo, Gimnasia enfrentará en cuartos de final al ganador del cruce entre Boca y Talleres de Córdoba que se enfrentarán el 6 de septiembre en Mendoza.
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